Desde el Acuario piden por un centro de rehabilitación marina

La solicitud proviene del grupo de vecinos que trabaja en la restauración del emblemático lugar, luego de realizar el primer rescate de su historia con un pingüino encontrado en Mar Azul.

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El último fin de semana, nuestra ciudad tuvo un curioso visitante que llegó sin que él lo planeara y sin que nadie lo esperara. Se trató de un pingüino de penacho amarillo, que fue visto en la playa de Mar Azul por los propietarios del bar Kupal. Lamentablemente, muchas veces la gente que encuentra a estos animales suele hostigarlos o incluso llevarlos a su domicilio, creyendo que pueden domesticarlos y hacerlos comportar como una mascota. Pero eso solo sucede en los dibujos y en las películas de animación: lo importante es llamar rápidamente a gente especializada y ayudar a que sea tratado con celeridad, ya que el animal suele encontrarse en situación de auxilio y con necesidades de ser socorrido.

Por suerte para este inesperado visitante, los dueños del bar se comunicaron con el grupo Pro Recuperación del Acuario, que acudió al llamado. “Se encontraba en buen estado y sin heridas, aunque con signos de desnutrición”, cuenta el biólogo marino Alan Rozenthal (foto). De manera desinteresada, la veterinaria PoliVet realizó la evaluación correspondiente del pingüino y la pescadería Marea Pez facilitó la comida con la cuál alimentaron al penacho amarillo. Luego fue recogido por Mundo Marino, donde siguen trabajando en su recuperación antes de liberarlo junto a otras especies que tienen bajo protección.

A pesar de la satisfacción que les provoca haber terminado positivamente su primer salvataje, el grupo de trabajo volvió a remarcar la necesidad de realizar un trabajo de reciclado a fondo que permita usar las instalaciones del viejo Acuario como centro de rescate y rehabilitación de fauna marina. “De esa forma, podríamos rescatar a los animales que salen a nuestras playas y llevarlos a ese espacio para hacerles los primeros auxilios, en vez de tener que trasladarlos casi 100 kilómetros hacia donde está el centro de atención más cercano”, apunta la Licenciada en Turismo Florencia de Cabo, integrante del equipo.

El proyecto también plantea destinar un sector del lugar a un centro de historia natural. En abril había aparecido ya sin vida una tortuga marina a la altura del balneario Windy, la cual fue enterrada para poder conservarla y extraída recién días atrás. “Ese caso fue tan solo una muestra de la cantidad de fauna marina que aparece sobre nuestras costas en esas condiciones, y que puede ser estudiada para conocer mejor a las especies que dan vida a nuestro mar y las razones de su deceso”, opinó Alan Rozenthal, que está trabajando con el ejemplar y es especialista en ese tipo de quelonios.