Una nueva estrella ilumina al gran campeón del fútbol zonal

Atlético se quedó con el Clausura y amplió su brecha como el equipo activo más ganador de la historia de la Liga Madariaguense. Un 2014 inolvidable en el que ganó todo lo que jugó, justo antes de cumplir 40 años desde su fundación.

Atlético finalizó sus compromisos deportivos del 2014 dejando una sensación indiscutible: de momento, no existe equipo capaz de discutirle el protagonismo en el fútbol de la zona. Nuevo Amanecer de Ostende le sacó un empate cuando ya estaba consagrado campeón del Apertura, el CADU obtuvo una igualdad que le sirvió a Atlético y apenas San Lorenzo lo pudo vencer, aunque recién en la última jugada del partido. Fueron las únicas veces en las que el Canario cedió puntos durante una temporada en la que ganó 22 de los 25 partidos que jugó.

El Atle impuso su juego y su estilo en toda cancha y ante cualquier rival y no dejó espacio alguno para el lucimiento ajeno. Ayer batió a Nuevo Amanecer, el último equipo al aún no había vencido en el 2014, y cerró otra campaña inolvidable. Solo el gran nivel de El León de Madariaga (otro de los elencos fuertes de estos tiempos) postergó su consagración en el Clausura, consumada en la última fecha tras superar al equipo de Ostende por 3-1 con un tanto del pinamarense Nicolás Turienzo y un doblete de Lucho Sabalette, la aparición fubolística más promisoria de la cantera canaria.

Para el equipo de casaca amarilla, esta coronación redondeó un 2014 pleno en el que ganó todo lo que jugó. Anteriormente había obtenido el Apertura de la Liga Madariaguense (alcanzando además un récord de valla invicta cercano a los mil minutos) y también el Regional de la Unión Deportiva del Tuyú, segundo en su historia, superando nada más ni nada menos que al CADU de Santa Teresita y a Social de Mar de Ajó, los dos equipos de la vecina Liga de La Costa con los que solió encontrarse en otras definiciones.

El Clausura cierra la saga ganadora del 2014 con otra campaña para el recuerdo, porque además de la impresionante cosecha (10 victorias en 11 fechas) logró desplegar un fútbol serio, prolijo y entretenido. El bloque defensivo, con pilares como el arquero Leandro Ullúa o el zaguero Daniel Di Maulo, convirtieron el arco propio en zona hostil para el enemigo (solo diez goles en todo el año), mientras que la zona creativa contó con una interesante sociedad entre la experiencia de Marcos Zárate y Nego Díaz y la juventud de Alan Fresco y Gastón Vázquez. Como si esto fuera poco, al poder de fuego de Pepe Blanco, Maxi Saranite y Lucho Sabalette se les sumaron constantes aportes de jugadores que no eran delanteros o no fueron titulares, tales los casos de Manolo Gómez, Nicolás Turienzo y el lateral Oscar Pilloni.

El estreno de Flavio Simonetti en el primer equipo del Atlético coincidió con un intenso recambio propuesto por el club a principios de temporada. Simonetti es parte desde este proceso desde sus inicios, allá por 2012. En aquel entonces era ayudante de campo de Manuel García Pardo, a quién ahora reemplaza. En su primer año como director técnico ya sumó tres títulos, dos de ellos de Liga, en donde Atlético ya acumula 16 copas. Es, de los equipos actuales, el más ganador. Y quedó a solo una del récord histórico del Cosme, que hace rato no compite y tiene 17 desde que la Liga le reconoció un campeonato en 1983.

El 2014 acaba pero la esperanza sigue. Se alimenta con el próximo desafío: el Torneo Federal C 2015, al que acaba de clasificarse. Las dificultades económicas asoman como un viejo enemigo, aunque nada le impedirá a estos muchachos salir por la provincia a ofrecer sus dignidades ante los poderosos rivales de la región.

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